Javier Corcuera: «Conseguí rodar la película con mi padre antes de que falleciera»

22/10/2019.- La sección Tiempo de Historia ha estrenado este martes 22 de octubre el largometraje El viaje de Javier Heraud, con la presencia del director, Javier Corcuera, y los productores, Hugo Carmona Chacón, Sergio García Locatelli y Gael Herrera. El documental se estructura desde el rostro y la voz de Ariarca Otero, sobrina-nieta de Javier Heraud. Es la protagonista de una indagación tanto en el tiempo como en el espacio: es la búsqueda de la memoria de Heraud, a través de la gente que lo conoció, pero también un recorrido por los lugares que vivió.

Antes de comenzar el filme, el director ha señalado que para él es un trabajo muy especial ya que «es una película muy personal en la que mi padre es protagonista durante un rato; conseguí rodar con él pocos meses antes de que falleciera» y, además, ha dedicado la proyección a su madre «que ha venido desde Perú y está aquí en la sala».

En el coloquio tras la proyección en los Cines Broadway de Valladolid, Javier Corcuera ha mencionado que «me interesaba mucho contar la historia desde alguien que tenía la edad de Javier Heraud cuando le mataron». Por eso escogió a su sobrina-nieta, Ariarca Otero. A pesar de conocerla varios años antes, cuando comenzaron a rodar, tenía 20 años. Además, como anécdota, ha añadido que «terminamos el rodaje justo el día del cumpleaños de Ariarca, que cumplía 21 años, delante del río donde mataron a Javier, con la misma edad».

Por otra parte, todos los productores coinciden en que cuando Javier Corcuera les contó su idea en 2013, ninguno se echó para atrás: «no podíamos dejar escapar esta película pues hay cosas que merecen ser contadas». Sergio García ha apuntado que «era importante participar en un documento que va a quedar en la historia».

Para finalizar, el director peruano ha remarcado que ninguno de los personajes que aparece en la película se ha estudiado un guion, sino que «todo son pequeños fragmentos de muchas horas de conversación» y que cuando les interesaba, les mandaban repetir algunos diálogos.