«Todo empezó cuando vi la historia de Fahrije Hoti en televisión. Yo conocía a la actriz Ylka Gashi, habíamos trabajado juntas en un cortometraje, y le propuse viajar a aquel pueblo kosovar a conocer al personaje real. Cuando hablamos con Fahrije, su vida, su personaje, me inspiró mucho y me impresionó tanto… Mientras estaba hablando con ella sentí que no era solo otra película para mí, que era mi deber transmitir la historia y la vida de esa mujer fuerte». La directora Blerta Basholli compareció este miércoles, 27 de octubre de 2021, en el Salón de los Espejos del Teatro Calderón para presentar Hive, una película basada en la historia de superación de Fahrije Hoti, cuyo coraje ejemplifica el de tantas mujeres obligadas por las circunstancias a buscar formas de supervivencia en un entorno machista, hostil y devastado por la guerra.
Acompañada por la actriz Ylka Gashi y el productor Yll Uka, la joven directora kosovar subrayó que, para ella, fue magnífico que que Ylka quisiera formar parte del proyecto. “Compartimos, vivimos la historia juntas, reflexionamos mucho sobre el personaje y sobre la película. Y ese trabajo que hicimos juntas fue muy importante para el proyecto en sí”.
En su primer largometraje, Blerta Basholli narra la historia real de una viuda kosovar que intenta salir adelante y montar un pequeño negocio de agroalimentación en su aldea masacrada por la guerra, para lo cual deberá enfrentarse a una sociedad machista y patriarcal.
«Antes de hacer la película pasamos bastante tiempo con Fahrije y las mujeres del pueblo. Fue muy duro lo que pasó allí, perdieron a mucha gente, las mujeres perdieron a familiares, maridos, padres, hijos, amigos… Estaban intentando recuperarse de ese trauma, pero a la vez vivían en una sociedad patriarcal. En la vida real fue todo mucho más duro de lo que se ve en la película, fue muy muy duro», explicó la cineasta. «Las mujeres, al principio, incluso se resistieron al proyecto de Fahrije, y eso sucedió por varios motivos: por la sociedad en la que vivían y porque estaban muy traumatizadas. Fahrije tuvo que luchar contra el patriarcado y contra la resistencia de muchas mujeres que no querían unirse a ella, y el proceso resultó bastante largo y difícil… Sin embargo, en la última visita que hicimos a la fábrica de Fahrije vimos que había unas cien mujeres trabajando allí y que forman una buena comunidad, aunque todo eso llevó su tiempo».
La actriz Ylka Gashi, que se mete en la piel de Fahrije Hoti, recordó que el proyecto, desde que surgió la idea de hacer una película, les había llevado bastante tiempo, unos ocho años en total: «Fahrije fue una inspiración para nosotras, como artistas y como mujeres. Realmente queríamos honrar su figura y su carácter, y nos tomamos muy en serio el proyecto, que fue muy difícil porque nos tocó en lo personal».
Para Gashi, que tuvo algunos papeles secundarios en películas rodadas en Kosovo después de la guerra, este ha sido su primer papel como protagonista en un largometraje. «Me volví a enamorar de actuar y de la profesión, porque me enamoré de esta historia, pusimos mucho amor en nuestro trabajo. En Kosovo es normal que exista conexión con la historia, porque todos sabemos lo que ha pasado, pero cuando vemos la repercusión que está teniendo la película en otros países nos sentimos muy contentas de que el público internacional conecte y comprenda lo que pasó. Hemos visto también que, después de las proyecciones, hay muchas búsquedas en Google para ver quién es Fahrije, qué es el ajvar…».
El productor Yll Uka, por su parte, señaló que se había unido al proyecto seis años atrás. “Blerta Basholli me enseñó el primer borrador del guion, y me encantó. Recibimos apoyo de la Comisión de Películas de Kosovo y de otros países, porque al final esta película es una coproducción entre cuatro países”. Sobre la situación del cine en Kosovo, Yll Uka indicó que durante los últimos ocho o diez años se ha venido trabajando muy duro, apoyando muchas producciones. «Se han hecho un montón de películas, que están teniendo éxito, reconocimientos y premios en festivales de todo el mundo. En Kosovo hay muchas historias interesantes que contar, y esto abre las puertas un poco. El año que viene nos han prometido que se duplicará el presupuesto de apoyo a las películas, así que tenemos bastantes expectativas e ilusión».
Sobre el hecho de que Hive haya sido seleccionada para representar a Kosovo en los Oscar —que entre otros galardones la película ya recibió tres premios en el festival de Sundance—, Basholli manifestó sentirse «honrada y muy feliz»: «Al principio no pensábamos en esas cosas, sino en cómo contar y trasmitir la historia. Pero la repercusión ha sido muy positiva, ha estado en muchos festivales, estoy muy contenta de estar aquí en la Seminci, especialmente… Y que seleccionaran nuestro filme para los Oscar ha sido como una recompensa. Esperamos tener éxito».
Hive se estrenará en Kosovo en los próximos días. «Fahrije y una amiga suya ya la vieron y están muy contentas. De hecho, Fahrije nos ha acompañado en algunos viajes para presentarla, aunque ahora mismo está muy ocupada con la fábrica y en esta ocasión no ha podido venir a Valladolid. Espero que cuando el resto de las mujeres de la aldea la vean, les guste también», advirtió Basholli.
La película se proyecta este miércoles 27 a las 22.00 horas en los teatros Calderón y Carrión, y mañana jueves 28 a las 16.30 horas.