La sección Punto de Encuentro rebusca entre las nuevas miradas del cine de autor contemporáneo para traer a la 69ª edición de Seminci películas como Familiar Touch. Su directora, Sarah Friedland, ha reflejado sus propias vivencias como trabajadora en un centro de cuidados en Nueva York. «Mi experiencia previa proponiendo talleres relacionados con el cine para los internos ha sido fundamental, y he querido replicar la práctica en la realización de la película».
Familiar touch narra la historia de Ruth, una mujer octogenaria que debe acostumbrarse a la vida en una residencia de cuidados asistidos, mientras se enfrenta a su conflictiva relación consigo misma y con sus cuidadores, en medio de sus cambios de memoria, identidad con respecto a la edad y deseos.
La idea parte de la propia situación familiar de la directora, que ha querido detenerse en el trabajo previo al rodaje, en el que esta serie de talleres sobre lenguaje cinematográfico permitió enseñar a las personas no profesionales elegidas para interpretar a los ancianos de la residencia los mecanismos de una cámara y todo lo que recorre el trabajo de rodaje.
Durante el rodaje quiso acercarse a los cuerpos y los ritmos de la vejez, a la adaptación progresiva de Ruth y a la convivencia entre los internos. La directora ha reiterado que es una película que va mucho más allá del resultado y ha destacado todo el tiempo que le ha llevado construir la idea y trabajarla con los actores y el equipo.