25/10/2020.- La 65 Seminci ha acogido este domingo 25 de octubre la mesa redonda sobre el IV Encuentro de Mujeres y Cine que, centrado en esta ocasión en el mundo de la enseñanza, ha alertado sobre las consecuencias que la prolongación de la crisis como consecuencia de la pandemia de COVID-19 tendrá tanto para docentes como para estudiantes, que sufrirán una mayor precarización y un retroceso en ámbitos como el acceso, la conciliación y la visibilidad.
Esta crisis, según lo ha destacado la vicedecana de Periodismo y Comunicación Audiovisual de la Universidad Carlos III de Madrid, Concepción Cascajosa, ha hecho visible el universo de los cuidados, tradicionalmente asociados a las mujeres, y existe el peligro de que las cuidadoras, tanto docentes y como estudiantes, puedan ver perjudicadas sus carreras por este hecho, por lo que ha apelado a la corresponsabilidad tanto de las instituciones públicas como de los compañeros del sector.
“Así se hace una sociedad más humana”, ha destacado Cascajosa antes de que Belén Bernuy, de la ECAM, asegurara que en su caso, en sus clases, a las alumnas les cuesta más alcanzar el liderazgo que a los estudiantes, por lo que ha apuntado a la necesidad de que ellas tengan referentes también en el mundo de la docencia, y de que ellos acepten que pueden tener jefas.
El debate del encuentro ha girado en torno al informe elaborado por Concha Gómez, quien durante la mesa redonda ha expuesto algunos de los principales datos sobre la situación de la enseñanza del cine en España y el rol que las mujeres juegan en ella: el 97,7% de los docentes de Infantil y Primaria son mujeres, mientras que en el caso de la educación universitaria el porcentaje desciende hasta el 41,8, de las que el 45,3% son contratadas y solo el 22,5% son titulares de una cátedra.
A partir de ese mapa, Áurea Ortiz, Belén Bernuy, Belén Funes, Concepción Cascajosa, Helena Fernández, Marta Nieto, Marta San Vicente, María Luisa Ortega, María del Puy Alvarado, Nuria Aidelman, Eulália Iglesias, Mercedes Miguel, Patricia Ferreira, Laura Bermejo, Jara Yáñez y Concha Gómez han debatido durante el fin de semana sobre la situación y han concluido, entre otras cuestiones, que las instituciones educativas y culturales tienen que destinar fondos y recursos para realizar estudios sobre el papel de la mujer en el ámbito de la enseñanza, y en concreto en la enseñanza del cine.
Visibilizar la contribución de las mujeres
Asimismo, las participantes consideran necesario revisar el canon de la historia del cine y del audiovisual en los currículos educativos con el fin de hacer visible la contribución de las mujeres, no sólo como directoras sino en otros trabajos técnicos y creativos, así como trabajar para que las mujeres logren más posiciones de liderazgo efectivo en los centros de formación, por las repercusiones que ello puede tener en políticas de contratación, el diseño de planes de estudios y la implementación de prácticas docentes.
En su opinión, es imprescindible reflexionar sobre la manera en que el profesorado puede estimular la participación de las mujeres en su propia formación, así como combinar las dos opciones para abordar la perspectiva de género en el cine: hacerlo de una manera transversal e interdisciplinar y hacer directamente cambios en los planes de estudio para incorporar asignaturas específicas.
Las participantes apuestan por aprovechar la alta disponibilidad y diversidad que ofrece la cultura digital facilita para revisar los cánones tradicionales, tanto en lo cinematográfico como en lo bibliográfico, y para acceder a las obras dirigidas y escritas por mujeres, aunque advierten de que en estas plataformas digitales existen instrumentos de poder que regulan los algoritmos de accesibilidad y reducen la diversidad de la oferta.
Las conclusiones elaboradas en el seno del IV Encuentro exhortan a los centros educativos de todos los niveles a facilitar la incorporación de mujeres en las enseñanzas técnicas y visibilizar referentes de estas especialidades, apuestan por establecer puentes y espacios de intercambio recíprocos entre la educación primaria, secundaria y bachillerato con los universitarios y de formación superior en lo referente a la enseñanza del cine y del audiovisual y recomienda formar a los docentes de la educación pre-universitaria en cultura cinematográfica y audiovisual con perspectiva de género. En referencia a este último aspecto, las participantes se han comprometido a elaborar un documento de Buenas Prácticas para alcanzar este objetivo.
Aquí puedes leer y descargar las conclusiones: