EDITORIAL
MÁS DE 450 PROYECCIONES DESPUÉS…
La 64 Semana Internacional de Cine de Valladolid toca a su fin. Han sido más de 450 proyecciones y casi 270 películas entre largometrajes y cortometrajes. Un año más el festival ha celebrado el cine independiente, de autor, fiel a sus señas de identidad. La ciudad ha cumplido con el rito de acudir a las salas, a los ocho escenarios principales y a otros muchos que se suman al ambiente cinéfilo durante ocho días.
La 64 edición se despide con uno de esos autores de la casa, Mika Kaurismäki, que vuelve a Valladolid con la película de clausura, Master Cheng (fuera de concurso). El finlandés entró en Seminci por la puerta de Tiempo de Historia (su documental Bra- sileirinho participó en la 50 edición) y desde entonces ha participado en otras cuatro ocasiones en la Sección Oficial. Un ejemplo más de la fidelidad que se crea entre el certamen y sus autores.
Los distintos jurados pronuncian hoy su veredicto. Sea el que sea, el festival ha cumplido con su propósito: mostrar los últimos trabajos de directores consagrados y descubrir al público otros nombres llamados a escribir la historia del séptimo arte en los próximos años; celebrar el cine de autor, en definitiva.