Tristán es un escritor frustrado que vive de escribir frases inspiradoras en las sobrecillos de azúcar. Su rutinaria vida cambia cuando acepta, en misteriosas circunstancias, transportar el cuerpo congelado de su hermano Simón a través de España, para enterrarlo en la casa donde crecieron. Aunque llevaban años sin hablarse, Tristán pronto descubrirá que el pasado y los errores de su hermano le persiguen. Sin embargo, Álex, una joven autoestopista a la que recogerá por el camino, le convencerá de que los obstáculos a los que tendrá que enfrentarse en este extraño viaje por carretera son quizá su última oportunidad para vivir una experiencia verdadera.