1944. Con la ayuda de varios colaboradores, cuatro poderosos líderes fascistas en la Italia de Mussolini secuestran a dieciocho jóvenes (nueve hombres y nueve mujeres) y los encierran en un palacio cerca de Marzabotto, donde los nazis ejecutaron una masacre durante la Segunda Guerra Mundial. En la gran mansión impera el reglamento de los señores, al cual nadie puede escapar. Esta ley les faculta para disponer de la vida de sus prisioneros en cualquier momento y de cualquier modo, y las transgresiones se castigan con la muerte.