Toxic, gran ganadora del pasado Festival Internacional de Cine de Locarno (Leopardo de Oro y premio a la mejor ópera prima), aborda la relación conflictiva de las protagonistas con sus cuerpos: elementos fundamentales de autodescubrimiento y, a la vez, campos de batalla de los que no pueden escapar. Maria y Kristina son dos adolescentes que buscan escapar de la ciudad industrial en la que viven y se inscriben en una sospechosa escuela de modelos, donde se verán obligadas a cumplir con exigencias corporales extremas. Desde este contexto la lituana Saulè Biluvaité explora las profundidades de la angustia adolescente en una sociedad cimentada sobre el culto al cuerpo y los cánones inalcanzables de belleza. Y, a partir de elementos autobiográficos, formula una potente crítica social en la intersección entre la búsqueda de la perfección y el retrato de la vida en las periferias.